El soporte presencial va dirigido a aquellas actividades que requieren la presencia de un operador técnico especializado. Previo al funcionamiento regular del servicio se analiza las necesidades específicas del cliente a corto, medio y largo plazo.
Visita urgente: Tras un análisis previo, se acuerda el desplazamiento para resolver un problema específico. Este servicio tiene tiempos de respuesta de entre 2 y 24 horas.
Visita programada: Se fija una fecha de visita al cliente con una descripción previa de las tareas que se van a realizar y el tiempo que se va a dedicar en ellas.
Mantenimiento: Se fija un calendario periódico en fechas y horarios y con una descripción previa de las tareas que se van a realizar, se programan intervenciones en el tiempo de asistencia presencial.